Emprender no es un acto instantáneo: es una emoción que nace, crece y se transforma. Y así, con paciencia, dedicación y mucho esfuerzo, fuimos construyendo la visión de lo que queríamos ofrecer. La búsqueda de un producto distintivo fue intensa. Queríamos algo que nos representara, que hablara por nosotros y que reflejara la esencia de lo que somos como perfumería.

Y un día lo encontramos, así nacieron nuestros Mini Perfumeros Recargables. Un diseño práctico, elegante y versátil que rápidamente conquistó a quienes nos eligen. Cuando los lanzamos por primera vez, sentimos algo que pocas veces sucede: la magia de ver un sueño materializarse.

 

Pero lo más importante de esta historia tiene que ver con algo que trasciende un producto: A través de la venta de los mini perfumeros recargables, Fanny Perfumería destina lo recaudado a instituciones locales que trabajan con la niñez, colaborando según sus necesidades más urgentes.